Muchos recuerdos vienen a mi mente cuando pienso en el pan trincha.
Uno de esos recuerdos me lleva a la casa de mi familia paterna. Durante un año, en la época de los 90′ vivimos con mis tías y abuelo en la «casa grande» por la zona del hospital militar de Asunción. En la esquina había una despensa, el típico almacén de barrio que te vendía de todo y a granel.
Recuerdo su mostrador, y al fondo una bolsa de harina pero llenos de pan trincha que desprendían ese aroma a pan recién hecho. Si cierro los ojos, todavía puedo olerlos.
Qué ricos eran los desayunos con este pan, untado con manteca y dulce o mermelada. O unas rebanadas de pan trincha con paté a media mañana.
Cómo serían de difíciles esos tiempos, que la gente compraba los panes no enteros, sino por bollos. Si no lo viviste, ¿te imaginas?
Probablemente ahora resulte impensable comprarlo así y según me cuentan es cada vez más dificil encontrar este tipo de pan porque pocas panaderías lo siguen haciendo.
Por suerte, después de varios intentos y una gran ayuda de Cristian, un seguidor de la página, por fin pude lograr hacerlos en casa.
Te dejo con la receta del mítico pan francés o pan trincha.
Hola Carolina, tenemos las dos recetas, una para freir y otra para el horno, está en la parte de masas.
Saludos!
Gracias por compartir la recta del pan, ya lo vos a probar hoy mismo!!
podrias tambien publicar la receta para discos de empanadas? ya he probado de todo y no le encuentro el punto para hacer discos que pueda congelar y descongelar y que no se pegue todo al final, millones de gracias